Madrid versus Barcelona
El otro día recibí la noticia de que Madrid había superado a Cataluña en índices económicos –por aquello de que la moral más vale no menealla, amigo Sancho– y saqué unas conclusiones sobre el modelo territorial de España, la cuestión del separatismo catalán y la perenne rivalidad entre Madrid y Barcelona. Se me ocurrió postear en las redes sociales el artículo de Libre Mercado que hacía referencia a esta situación y se me echaron encima algunos amigos a los que les escuece ese medio de comunicación, la "prepotencia" de Madrid y el hecho de que en esa comunidad hayan triunfado unas opciones políticas diferentes de sus gustos.
No sé por qué levanta tantas ampollas el tema de Madrid, pareciera que planea aún el fantasma del centralismo desde la época de Felipe II, pero muy especialmente durante la dictadura franquista. Hay que liberarse de cadáveres que nos lastran, aunque algunos han querido exponer a la luz pública los restos de un generalísimo en el que nadie pensaba, excepto los que pretenden utilizar su memoria con fines políticos. No se debería tratar de justificar los errores presentes achacándolo a un pasado mítico, negativo o positivo. La guerra civil es una herida que aún no se ha cerrado para la memoria de algunos españoles y, en ese sentido, no haría mal en recordar aquí, en favor de Madrid, la heroica y tenaz defensa en esta ciudad frente al ejército de Franco. Fue una muestra de valor colectivo al margen de la valoración política que se haga de ello.